A veces queremos cambiar algo, sumar un hábito nuevo, y aunque sepamos que nos va a hacer bien… nos cuesta un montón. Nos pasa a todos. Nos frustramos, lo intentamos un par de veces, lo dejamos. Volvemos a empezar, probamos otra cosa. Y así pasa el tiempo.
A mí me pasó con algo tan simple (pero tan difícil de sostener) como leer. Siempre quise hacerlo más, pero no lo lograba. Probé con distintos libros, en español, en francés, en inglés… Me compré libros chiquitos para llevar de viaje, después me compré el Kindle… Y nada, no terminaba de engancharme. Fue casi un año de prueba y error.
Hasta que un día me comprometí conmigo misma a hacer algo concreto: 👉 “Los miércoles, en el metro —que son 30 minutos de viaje— sí o sí voy a leer unas páginas.” Y empecé. Un par de hojas. Al principio por obligación, después con ganas. Me empezó a gustar lo que leía, y cada vez que tomaba el metro, aunque fuera por 10 minutos, ya sacaba mi Kindle. Ahora, incluso cuando paseo a mi perro y me siento un rato, saco el Kindle y leo.
💡 Con el ejercicio pasa lo mismo.
No hace falta empezar con algo grande. No tienen que ser 5 días por semana, ni 1 hora entera. Quizás es solo un día fijo a la semana, 20 minutos. Y después dos días. Y después tres. Y así, de a poquito, lo que antes parecía imposible se convierte en parte de tu vida.
Y lo hacemos por algo simple, pero vital:
Para no quedarte sin aire al subir escaleras. Para agacharte a recoger algo sin que te duela la espalda. Para levantar a tu hijo/a sin miedo de lesionarte. Para sentirte con energía, ágil, con fuerza.
No entrenamos por entrenar. Entrenamos para vivir mejor. Y si sentís que no tenés tiempo o que te cuesta empezar, tengo algo para vos:
✨ Una rutina de 20 minutos gratis, pensada para vidas ocupadas, para que puedas sumar este hábito sin complicarte. ¿Cómo la obtengo? ¡Si aún no la recibiste en nuestro Newsletter, más abajo encuentras el formulario para dejar tu correo y te llegará en tu bandeja de entrada!
